Anoche, en la compu. con mi vaso de agua al lado.
Como varias veces, especialmente a la noche, bien dormido, toco el vaso sin querer con mi brazo y cae.
Uh... muy triste situación, la del vaso que cae, se rompen los vidrios, buscando la escoba, juntaando los escombros. sintiendose algo tonto, otra vez, lamentando la perdida de un vaso.
Toda esta triste imagén se me vino en la cabeza durante esas breves centésimas de segundos entre que toqué el vaso y llegó al piso.
Al llegar al piso, chocó y no se rompió. Quedó intacto.
Fui muy Feliz
2 comentarios:
martín: tu blog es simplemente extraordinario. En particular me gustó el empeño científico de "excusas", pero muchas historias cotidianas y mínimas muy buenas. Nos encontramos en la fiesta del muñeco en la plata, o en alguna división de játric, dale?
Jaja, me gusto mucho tu relato. Sin dudas el vaso roto se te pasa por la cabeza antes de que caiga al piso. Justamente me ha pasado ayer, que en una parrilla en
palermo sin querer tire el vaso al piso y por suerte no se rompió. Menos mal
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